Inspirado en el huaco de la fruta chirimoya de la cultura Mochica, este collar reinterpreta la forma ancestral en una pieza contemporánea.
Tallado en madera y detallado con puntos de plata, propone una textura visual y táctil que evoca tanto la superficie de la fruta como la riqueza material de nuestra cerámica precolombina.
Incluye una cadena de plata 925 de 50cm de largo.




